Un día estaba en casa de una gran
amiga mía y me puse a ojear su estantería de libros mientras la esperaba. De
repente captaron mi atención tres de ellos muy juntos, eran de color negro,
pequeñitos y compartían editorial. Los fui sacando uno a uno y leyendo sus
títulos en alto:
–Lola Flores...Cayetana de
Alba...María Jiménez...¿Qué es esto?
–Dije con cierta curiosidad y asombro.
–Son biografías –Contestó mi amiga.
–Eso ya me lo he imaginado.
–Son biografías de personas que me
inspiran. Tú mezcla estos tres libros –Continuó mientras me los cogía de las
manos y los barajaba –y salgo yo.
No pude hacer otra cosa que reírme. Por el tono en que lo dijo, empleando cierta ironía, y porque en el fondo pensé
que tenía razón. Lola (sí, no podía llamarse de otra manera que Lola) es una de
esas amigas que todos queremos tener: divertida a más no poder, ingeniosa e
inteligente.
Ella, como podéis suponer por sus
tres divas, es muy del sur, muy de aquí, de lo auténtico, de lo de toda la
vida, muy de Triana (como ella misma se define). Pero yo sé que la mitad es
pose, es su personaje, es lo que el público pide y ella gustosa ofrece; porque
Lola no se queda en eso, es muy abierta, ha salido fuera, vivido en el
extranjero, lidera una asociación internacional... En fin, tiene ese equilibrio
perfecto entre lo de allí y lo de acá. Y es verdad que tiene algo de cada una
de esas mujeres, y no, no es un palacio en las Dueñas, ni una familia de
artistas (aunque eso está por discutir); es más bien, esa gran personalidad, esa
fuerza, ese carisma... Sin duda estas mujeres
la inspiran y la inspiraron.
la inspiran y la inspiraron.
Y me quedé pensando sobre este
interesante tema del "inspirar". Sin ir más lejos, esta anécdota es
la que me ha inspirado a mí a escribir el post, se podría decir que la
inspiración mueve el mundo, así que no es cuestión baladí. En la vida siempre hay
cosas que nos inspiran, pueden ser personas, lugares, libros, canciones... Creo
que cada uno estamos hechos de aquello que nos inspira. Ya me entendéis,
nuestra personalidad se compone de: un trocito de aquel libro de la
adolescencia que nos marcó, una pizca del atardecer de tu lugar preferido, un poco de aquella
frase que te dijo tu abuela... Así somos señores.
El año pasado lanzaron una campaña en mi empresa
a nivel mundial, consistía en contestar a la pregunta qué cosas te inspiran, hicieron videos, carteles y lo preguntaban en la red social. Yo contesté una
respuesta muy simple, pero que parece que gustó: "Me inspira trabajar en
una empresa que me pregunta que qué me inspira".
Tweet what inspires you .
Pero sin lugar a dudas, no hay nada
que pueda inspirar más que una persona. En inglés tienen una expresión para
esto: "Inspirational People". En español no existe
la expresión como tal. Un amigo mío extranjero, me dijo una vez que no existía,
porque no le damos tanta importancia al tema y porque, tristemente, aquí era
más difícil encontrarse "Inspirational People" en el día a día. A mí
me dolió la afirmación y creo que fue porque pensé que puede que tuviera hasta razón. No me malinterpretéis, en
España hay mucho talento, y tenemos cosas que aportar, pero a veces parece que
estamos como dormidos, como pendientes de otras cosas. La maldita crisis, el
bendito fútbol, el simple día a día, hacen que aparquemos el arte del inspirar y que nos
inspiren.
Porque, de un tiempo a esta parte, me
he dado cuenta de que el mejor piropo que puedo dar a alguien es: "me
inspiras"; y si quedo a tomar un café, un gin tonic o simplemente tengo
una conversación en la fotocopiadora de la oficina con alguien, y me falta
tiempo para correr a mi libreta a escribir una frase, ay amigo,
entonces esa persona es de las que me inspira.
A todos ellos va dedicado este post (como suele pasar, son todos los que están, pero no están todos los que son).
•A Martina: por enseñarme siempre el
otro lado de las cosas.
•A Inma: por ser una poeta de la
calle y hacer que te unas siempre a su poesía.
•A Enrique: por desprender entusiasmo por las cosas y ser ejemplo de valentía.
•A Nacho: por ser mi referente y
saber darme alas.
•A Ricardo: por romper las
barreras jerárquicas y hacer que disfrute y aprenda de su experiencia.
•A Fernando: por el entusiasmo que
transmite y contagia hacia su trabajo, después de tantos años en él.
•A Isabel y a Sonia: por demostrar
que se puede alcanzar el equilibrio entre éxito profesional y personal.
•A Carmen y a Lucía: porque cada vez
que leo uno de sus libros, me entran más ganas de empezar a escribir esa
novela.
•A Javier: porque leer su blog me
hace disfrutar, reír, llorar y sobretodo me inspira para seguir el mío.
•A Belén: por ser mi hemeroteca y
dominar como nadie el arte del saber escuchar.
•A Mercedes: porque filosofar juntas
es uno de los placeres de la vida.
•A Julia: por las largas
conversaciones que no llegan a conclusiones (ni falta que hace).
•A Lola: por inspirar este post, por inspirar mis días.
•A Andrea: por poner mi mundo del
revés y sacar lo mejor de mí.
Y a ti, ¿quién te inspira?
Y a ti, ¿quién te inspira?
La mayor inspiración es la vida en sí. Gracias por tenerte a ti en la mía:)
ResponderEliminarElisa, la gente que nos inspira a fin de cuentas es aquella que nos mueve!
ResponderEliminarA mi,sin duda,también me inspiran las palabras de tu blog.
Decía un tal Einstein: "Dar ejemplo no es la principal manera de influir en los demás; es la única!"
Entonces...a qué esperas para iniciar la novela? Tus lectores (los que lo somos y los que aún no saben que lo son)estamos expectantes!